La importancia de conocer el negocio en proyectos de implantación de Dynamics 365
Cómo ir más allá de los requerimientos técnicos para aportar valor real al cliente
La semana pasada no hubo newsletter, podría poner muchas excusas, pero “la vida”. Esta semana vengo con una reflexión sobre el papel de la consultoría en Dynamics 365 y el papel que creo que deberíamos tener los que participamos activamente en los proyectos con nuestros clientes, y que desgraciadamente, muchas veces no tenemos.
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Cuando nos involucramos en proyectos de implantación de Dynamics 365, nuestro papel como consultores o técnicos suele estar claramente definido. Normalmente recibimos requerimientos concretos que debemos trasladar a la herramienta. Sin embargo, limitar nuestra función a una mera traducción de requisitos a funcionalidades técnicas puede reducir significativamente el valor real que aportamos al cliente.
Dynamics 365 es, ante todo, una herramienta para mejorar procesos de negocio, automatizar tareas repetitivas y permitir que las empresas dediquen más tiempo a actividades que generen valor. Para conseguir estos objetivos, no basta únicamente con dominar técnicamente el producto. Debemos hacer un esfuerzo consciente por comprender el negocio del cliente y las particularidades que lo diferencian.
Cuando asumimos un proyecto de implantación sin interesarnos por cómo opera realmente la empresa, corremos el riesgo de convertirnos en simples ejecutores de peticiones. Esta posición limita nuestra capacidad para proponer mejoras reales y aprovechar todas las ventajas que Dynamics 365 ofrece. Es imprescindible acercarse al negocio con voluntad de entender por qué se hacen las cosas de cierta manera y cómo podrían hacerse mejor.
No se trata únicamente de conocer superficialmente los procesos clave del cliente. Debemos profundizar en las dinámicas internas, hablar con las personas involucradas en las tareas diarias y entender cómo cada área impacta sobre el conjunto. Esta visión integral es lo que nos permitirá identificar oportunidades de mejora que quizá el propio cliente no haya detectado inicialmente.
En la práctica, esto significa pasar del papel pasivo de simples receptores de requerimientos a uno más activo, en el que cuestionemos, propongamos y colaboremos estrechamente con los usuarios finales. Es habitual que quienes usan Dynamics 365 no conozcan todas las posibilidades de la herramienta. Nuestro rol implica hacerles descubrir esas oportunidades y explicarles cómo impactarán positivamente en sus procesos diarios.
Para conseguir esto, necesitamos desarrollar y cultivar una serie de habilidades que van más allá del conocimiento puramente técnico: las llamadas soft skills. Estas habilidades incluyen comunicación efectiva, empatía, escucha activa, capacidad de análisis y sobre todo, habilidad para trabajar en equipo. La realidad es que muchos proyectos fracasan o no cumplen plenamente con las expectativas porque estas habilidades no se trabajan lo suficiente.
La comunicación es crítica en todo proyecto. Es común que en los proyectos de Dynamics 365 intervengan múltiples departamentos y perfiles profesionales con diferentes niveles de conocimiento técnico. Saber cómo comunicar claramente conceptos técnicos a usuarios no técnicos puede marcar la diferencia entre una implantación exitosa y una llena de malentendidos o frustraciones.
Además, trabajar con Dynamics 365 implica necesariamente gestionar cambios en la forma en que las personas realizan sus tareas diarias. Comprender los procesos actuales permite anticipar resistencias, dudas o posibles dificultades en la adopción de nuevos procedimientos. Nuestra capacidad para empatizar con los usuarios finales y comprender sus miedos y preocupaciones es clave para asegurar una transición exitosa.
La experiencia demuestra que aquellos consultores que dedican tiempo a entender profundamente el negocio de sus clientes y que cultivan activamente sus habilidades interpersonales y de comunicación obtienen resultados mucho más satisfactorios. No solo implementan Dynamics 365 de forma eficiente, sino que además contribuyen a transformar positivamente el negocio y ganan la confianza del cliente.
En definitiva, conocer el negocio no es un valor añadido, sino una condición necesaria para lograr implantar Dynamics 365 con éxito. Nuestro verdadero valor como profesionales no reside únicamente en el conocimiento técnico, sino en nuestra capacidad para convertirnos en aliados estratégicos de nuestros clientes. Esto implica salir de nuestra zona de confort técnica y apostar por entender realmente qué mueve al negocio, cómo funciona y, sobre todo, cómo puede funcionar mejor gracias a Dynamics 365.